Historia del Arte - 2º Bachillerato
Historia del Arte - 2º Bachillerato
EL ARTE RENACENTISTA Y MANIERISTA
El Renacimiento, surgido en Italia en el siglo XV, representa un renacer cultural que marcó profundamente la historia del arte europeo. Mientras que el gótico tardío dominaba gran parte del continente, Italia desarrolló un estilo innovador que se extendió durante el siglo XVI, conocido como Renacimiento. El término "Renacimiento" proviene del italiano Rinascita, que alude al redescubrimiento de la Antigüedad grecorromana, adaptada a las necesidades y sensibilidades de la época.
Este movimiento se divide en tres períodos principales:
Quattrocento o Primer Renacimiento (siglo XV): Focalizado en Italia, caracteriza un interés por el realismo y los sistemas de representación racionalizados, aunque a menudo coexistían contradicciones temáticas.
Cinquecento o Renacimiento clásico (primeras décadas del siglo XVI): Se distingue por el idealismo y la armonía perfecta entre forma y contenido.
Manierismo (finales del siglo XVI): Marca un giro hacia la exageración formal, la sofisticación y el simbolismo.
El Renacimiento no solo influyó en las artes plásticas, sino también en la literatura, la filosofía, la música y la política. Florencia fue el epicentro de este cambio, impulsado por la Academia Platónica Florentina, que difundió una nueva concepción del mundo. Este enfoque, sin negar la existencia de Dios, colocó al hombre como el centro del universo, generando un arte humanista que priorizó la figura humana y sus dimensiones. Las proporciones ideales resurgieron, basadas en cánones clásicos como los de Lisipo, y la perspectiva permitió integrar al ser humano con la naturaleza y el paisaje urbano.
El quattrocento italiano: arquitectura, escultura y pintura
Arquitectura
El Quattrocento sentó las bases de la arquitectura renacentista, con figuras destacadas como Filippo Brunelleschi y Leon Battista Alberti. Las principales características de esta etapa incluyen:
Uso de órdenes clásicos: Columnas, pilastras y arcos de medio punto recreaban formas de la Antigüedad Clásica.
Proporción y unidad espacial: La belleza arquitectónica se basaba en proporciones matemáticas y antropométricas.
Materiales y decoración: Se empleaban piedra, ladrillo y mármol, con ornamentaciones como almohadillados, frescos y guirnaldas.
Tipología: Iglesias con plantas basilicales o centralizadas, villas renacentistas inspiradas en modelos romanos y palacios urbanos.
Ejemplos más relevantes
Cúpula de Santa María del Fiore (Florencia): Obra maestra de Brunelleschi, combina innovación técnica y estética.
Palacio Medici-Ricardi: Diseñado por Michelozzo, ejemplifica la arquitectura civil del Renacimiento.
Escultura
En escultura, el Renacimiento combinó influencias clásicas con innovaciones técnicas. Los artistas del Quattrocento, como Donatello y Lorenzo Ghiberti, exploraron nuevas formas de expresión:
Materiales y técnicas: Mármol, bronce y terracota, con un uso renovado de la técnica de cera perdida.
Temática: Religiosa, mitológica y retratista, destacando el naturalismo idealizado.
Elementos formales: Proporcionalidad estricta, contrapposto y tratamiento detallado de anatomías y ropajes.
El David, Donatello
Ejemplo más relevantes
David (Donatello): Primera figura desnuda en bronce desde la Antigüedad, que combina naturalismo y simbolismo.
Puertas del Paraíso (Ghiberti): Relieves en el Baptisterio de Florencia, que reflejan una maestría en la perspectiva y la narrativa.
Ejemplos representativos
Catedral de Notre Dame (París): Ejemplo icónico del gótico temprano, destacada por su fachada y vitrales.
Catedral de Chartres: Famosa por sus vitrales y su planta armoniosa.
Catedral de Milán: Representa el gótico tardío con su elaborada decoración.
Pintura
La pintura del Quattrocento revolucionó la representación visual al integrar avances científicos y técnicos:
Técnicas: Fresco, temple y óleo, con uso de estarcido y maniquíes para representar proporciones.
Temática: Religiosa, mitológica y alegórica, destacando el antropocentrismo y el retrato.
Elementos formales: Uso de la perspectiva lineal, composiciones equilibradas basadas en geometría y claroscuro para enfatizar la volumetría.
Ejemplos más relevantes
La Trinidad (Masaccio): Fresco que aplica las leyes de perspectiva de Brunelleschi, creando una ilusión tridimensional.
La Primavera (Botticelli): Obra alegórica que combina mitología y simbolismo neoplatónico.
La primavera, Botticelli
El Cinquecento: Apogeo del Renacimiento
El Cinquecento consolidó los ideales del Renacimiento en toda Europa. En este período, figuras como Leonardo da Vinci, Rafael Sanzio y Miguel Ángel Buonarroti llevaron las artes a su máxima expresión.
Arquitectura
La arquitectura del Cinquecento se caracteriza por la monumentalidad y la perfección formal:
Donato Bramante: Diseñó el Templete de San Pietro in Montorio y trazó los planos iniciales de la Basílica de San Pedro.
Miguel Ángel: Combinó proporción clásica y expresividad en obras como la Cúpula de San Pedro y la reforma de la Plaza del Capitolio.
Escultura
La escultura del Cinquecento, encabezada por Miguel Ángel, destaca por su dinamismo y profundidad psicológica:
David (Miguel Ángel): Símbolo de la perfección anatómica y la introspección humana.
Piedad del Vaticano: Obra maestra que combina naturalismo y simbolismo espiritual.
Pintura
Los grandes maestros del Cinquecento transformaron la pintura mediante innovaciones técnicas y narrativas:
Leonardo da Vinci: Introdujo el sfumato y la perspectiva aérea en obras como La última cena y La Gioconda.
Rafael Sanzio: Alcanzó la armonía perfecta en composiciones como La escuela de Atenas.
Miguel Ángel: Sus frescos en la Capilla Sixtina redefinieron el arte monumental.
Frescos de la capilla Sixtina, Miguel Ángel
El Manierismo: Innovación y Exageración
El Manierismo, surgido a finales del Cinquecento, rompió con la armonía clásica mediante la distorsión y la sofisticación:
Características: Exageración de proporciones, composiciones complejas y simbolismo.
Artistas destacados: Pontormo, Parmigianino y El Greco, cuya obra combina misticismo y teatralidad.
Ejemplo más relevante
El entierro del Conde de Orgaz (El Greco): Obra maestra que sintetiza la espiritualidad y el dramatismo manierista.
El entierro del conde de Orgaz, El Greco