Historia del Arte - 2º Bachillerato
Historia del Arte - 2º Bachillerato
EL ARTE ROMÁNICO
El arte románico fue un estilo artístico que floreció en gran parte de Europa entre el siglo XI y los primeros años del siglo XIII. Este periodo estuvo profundamente vinculado al contexto histórico de la Edad Media, coincidiendo con la expansión del feudalismo, las cruzadas, los peregrinajes religiosos y las reformas monásticas de Cluny y el Cister. Su nombre, acuñado en el siglo XIX, se debe a su estrecha relación con el arte romano, del cual deriva en términos técnicos y formales.
El románico se manifestó principalmente en la arquitectura religiosa, destacándose por su solidez estructural, el uso del arco de medio punto y las bóvedas de cañón y arista. Sin embargo, este estilo también abarcó disciplinas como la pintura y la escultura, subordinadas siempre a la arquitectura. Sus obras artísticas, concebidas como "biblias de piedra", tenían una fuerte función pedagógica destinada a transmitir los principios cristianos a una población mayoritariamente analfabeta.
Características generales
El arte románico se caracteriza por:
Corrientes locales: Aunque existía una base común, las diferentes regiones desarrollaron variantes locales con peculiaridades propias.
Predominio de la arquitectura religiosa: Las iglesias y monasterios fueron los principales ejemplos de este estilo.
Carácter narrativo: Las paredes de las iglesias estaban decoradas con pinturas y relieves que ilustraban historias bíblicas.
Bases del estilo gótico: La estructura y técnicas del románico sirvieron de transición hacia el arte gótico.
Relevancia limitada de los artistas: En la Edad Media, las artes manuales eran consideradas "mecánicas", por lo que los artistas románicos carecieron de reconocimiento social y sus nombres no han perdurado.
Arquitectura románica
La arquitectura fue la manifestación más relevante del románico, con especial énfasis en las iglesias, muchas de las cuales se convirtieron en centros de peregrinación al albergar reliquias sagradas.
Características arquitectónicas
Planta de cruz latina: Compuesta por naves laterales, crucero y ábside con capillas. Esta forma se asoció simbólicamente con la crucifixión de Cristo.
Orientación: Las iglesias se orientaban de oeste a este, con el altar mayor ubicado en el ábside oriental.
Coberturas abovedadas: Se utilizaban bóvedas de cañón y de crucería, y en algunas regiones de Francia se introdujeron cúpulas en los tramos de las naves.
Cimborrio: El crucero solía estar cubierto por un cimborrio, generalmente de techumbre plana.
Muros gruesos: Las paredes macizas y con escasas aberturas soportaban el peso de las bóvedas.
Aberturas abocinadas: Ventanas estrechas que ampliaban su apertura hacia el interior para favorecer la iluminación.
Iglesia San Martín de Tours
Escultura románica
La escultura románica se caracterizó por ser sintética, esquemática y simbólica, sin pretensiones de realismo. Su función principal era narrativa, al igual que la pintura.
Principales manifestaciones
Relieves en portales: Las entradas de las iglesias estaban decoradas con relieves que ilustraban temas bíblicos. El tema más común era el "Cristo Pantocrátor" como Juez del mundo.
Capiteles decorativos: Las columnas estaban coronadas por capiteles tallados con motivos religiosos, escenas fantásticas y parabólicas.
Pintura románica
Gran parte de la pintura románica se ha perdido, pero se conservan ejemplos significativos en iglesias, realizadas con la técnica del fresco.
Características de la pintura
Función narrativa: Al igual que la escultura, las pinturas se utilizaban para transmitir mensajes religiosos de forma clara y expresiva.
Esquematismo: Las figuras eran sintéticas, con rasgos convencionales que se repetían en diferentes obras.
Colores vivos: Los artistas empleaban tonalidades brillantes para destacar las escenas.
Ejemplos de pintura
Frescos: Decoraciones murales en iglesias, como los de San Clemente de Taül (Cataluña).
Pintura sobre tabla: Aunque menos frecuente, se conservan ejemplos en altares portátiles e ilustraciones de libros.
Mosaicos: Especialmente en Italia, donde los mosaicos decoraban los ábsides y las cúpulas de las iglesias.
Ábside de Sant Climent de Taüll